Un tumor óseo se debe al crecimiento de células anormales en los huesos, este tumor puede ser canceroso o benigno, y puede desarrollarse en el interior del propio hueso o extenderse a él desde otra parte del organismo.
Los tumores óseos malignos y benignos pueden crecer y comprimir el tejido óseo sano, pero los tumores benignos no se diseminan, no destruyen el tejido óseo y rara vez ponen la vida en peligro.
Los tumores óseos se pueden localizar en todos los huesos, pero existen localizaciones de elección para cada tipo.
Causas de tumores óseos
La causa de los tumores óseos es desconocida, los investigadores aún no tienen una causa claramente definida, pero por lo regular suelen presentarse en áreas del hueso que crecen rápido.
- Anomalías genéticas hereditarias.
- Radiación.
- Lesiones.
Síntomas de los tumores óseos
Los síntomas locales suelen ser inespecíficos, una persona puede tener una masa indolora en un hueso, pero con el paso del tiempo se vuelve dolorosa, este dolor puede ser intenso, similar al dolor de muelas.
- Fractura ósea por causa de una ligera lesión.
- Dolor óseo que empeora por las noches.
- Masa o inflamación en el lugar del tumor.
Clasificación de tumores óseos
El cáncer se puede originar en cualquier tipo de tejido óseo. Los huesos están formados por 3 tipos de tejidos: osteoide, cartilaginoso y fibroso.
- Tumores óseos no cancerosos: Osteocondromas, encondromas, condroblastomas, condromixofibromas, osteomas osteides, tumores de células gigantes.
- Tumores óseos cancerosos primarios: Mieloma múltiple, osteosarcoma, fibrosarcomas y fibrohistiocitomas malignos, condrosarcomas, sarcoma de Ewing, linfoma de hueso, cordomas, tumores malignos de células gigantes.
- Tumores óseos metastásicos: Los cánceres como pulmón, mama, próstata, riñón, glándula tiroidea y colón pueden extenderse al hueso.
Diagnóstico de tumores óseos
Se basa en los resultados de las pruebas de imagen, como radiografías, tomografías computarizadas o resonancia magnética nuclear, por lo regular se requiere de una biopsia, es decir realizar la extracción de una muestra del tejido del tumor o del hueso para examinarla.
Tratamientos para tumores óseos
- Tumores óseos no cancerosos: Habitualmente no requieren tratamiento a no ser que produzcan síntomas, no tienden a transformarse en otros tipos de lesiones.
- Tumores óseos cancerosos: Primero se recibe quimioterapia para reducir el tamaño del tumor, luego se extrae el tumor mediante una cirugía para reconstruirse con un injerto óseo.
- Tumores óseos metastásicos: El tratamiento puede ser radioterapia, quimioterapia o cirugía, pero esto dependerá del tipo de tejido involucrado.
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