La hematología es una especialidad médica que permite generar diagnósticos y tratar enfermedades de la sangre y sus componentes; para esto se recurre a un hemograma completo, una de las pruebas de laboratorio más importantes.
Un hemograma completo es un análisis de sangre que permite evaluar el estado de salud general de cualquier persona; este es un procedimiento seguro con riesgos mínimos, puede ser realizado en bebés, niños y adultos.
Para realizar la prueba se debe extraer una pequeña cantidad de sangre de una vena del brazo, la muestra pasará por una máquina especial para evaluar las células principales de la sangre y detectar anomalías mediante un microscopio.
Esta prueba realiza un recuento de la sangre que se encarga de medir:
- Glóbulos rojos o eritrocitos que son las células de la sangre que transportan el oxígeno
- Glóbulos blancos o leucocitos, que son las células de la sangre encargadas de combatir las infecciones
- Hemoglobina que es una proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno
- Hematocrito que mide la proporción de glóbulos rojos en la sangre, es decir, el porcentaje de eritrocitos en la sangre
- Plaquetas que son fragmentos de células que ayudan a la producción de coágulos sanguíneos
El hemograma completo es una de las pruebas de sangre más comunes.
La cantidad total de los glóbulos rojos, blancos y plaquetas ayuda a los médicos a identificar la presencia de ciertas enfermedades, como la anemia, leucemia, infecciones o inflamaciones.
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4 motivos para realizarse un hemograma completo
- Chequeo de salud general. Como parte de control médico, el hemograma permite conocer tu estado de salud, mediante el análisis de sangre se puede detectar de manera temprana una enfermedad, con esto se incrementan las probabilidades de tener un tratamiento exitoso.
Realizarte un chequeo médico te ayudará a prevenir enfermedades.
- Diagnosticar una enfermedad. Cuando una persona presenta ciertos síntomas y acude con un médico especialista éste puede necesitar de un análisis de sangre para diagnosticar qué está ocasionando los síntomas. Esta prueba puede utilizarse para confirmar algún diagnóstico por infección.
- Tener el control de una enfermedad. Los trastornos que afectan la sangre requieren de tener un control constante de las células sanguíneas, para que el médico pueda conocer el estado de salud y si se presentan cambios que deben tratarse con rapidez.
- Supervisar un tratamiento médico. Cuando se están administran medicamentos a una persona, las dosis pueden afectar el recuento de las células sanguíneas, por lo que un médico debe decidir cuál es el mejor seguimiento que puede brindarle al paciente.